El equipo local venía de lograr una victoria ante el CASI, en tanto que el visitante había sido derrotado por Alumni.

En cuanto al partido, el elenco dueño de casa comenzó más preciso, y ese contexto lo llevó a tomar el control de las acciones.

Aspereza con sus forwards, y dinámica y verticalidad con sus backs, marcaron el patrón de juego de los Rosarinos en el aspecto ofensivo durante los cuarenta minutos iniciales.

En defensa se desenvolvieron de manera prolija y mantuvieron una estructura sólida.

CUBA por su parte utilizó frecuentemente la patada como opción para ganar terreno, y eso hizo que le costara mucho la generación de juego.

En cuanto a su desempeño en la faz defensiva, mostró algunas oscilaciones. 

El curso del cotejo tomó un rumbo diferente en la etapa complementaria. Si bien “Plaza” tuvo buenos momentos en los cuales siguió mostrando un nivel superior al de su contrincante,

“El Universitario” comenzó a plasmar otra postura, y a partir de una gran muestra de carácter y actitud, fue construyendo los cimientos para revertir el resultado de un encuentro que

venía muy cuesta arriba.

Una ostensible mejora en el sistema defensivo, mayor confianza, tenencia de balón, juego asociado y contundencia, fueron los factores fundamentales para que en una “ráfaga” de veinte

minutos el “Azul y Negro” salga airoso, y se lleve el triunfo por 35-21.

Los jugadores entrevistados fueron Ezequiel Reyes (Atlético del Rosario), y Juan Cruz De Pellegrin (CUBA).  

Por Nico Liper